INEE: APLICADORES
Y EVALUADORES.
Wenceslao
Vargas Márquez
El día del
amor el magisterio nacional recibió su regalo: El Programa Anual 2014 de los
Procesos de Evaluación del Servicio Profesional Docente, de fecha 14 de febrero
en 54 páginas. Se agradece el gesto. En él hay plazos para proseguir con la
implementación ya en marcha de la Ley Docente y son de llamar la atención los
datos acerca de quiénes serán los aplicadores y los evaluadores del magisterio.
Por ejemplo,
antes del 25 de agosto del 2014 se aprobarán los elementos, métodos y etapas
para llevar a cabo la evaluación para la ‘promoción en la misma función’ en
Educación Básica y Media Superior. Seguramente aquí morirán definitivamente las
comisiones dictaminadoras en CBTis además de que nacerá el sustituto de Carrera
Magisterial.
En el Programa
Anual se encuentran también los Criterios y procedimientos para la ‘selección de los aplicadores’ en los
procesos de evaluación para el Ingreso
al Servicio Profesional Docente en Educación
Básica y en Educación Media
Superior, y en los procesos de evaluación
para la Promoción a cargos con
Funciones de Dirección (Directores) en Educación Media Superior, para el ciclo
escolar 2014-2015.
Hay también definiciones
y requisitos. Para el perfil del ‘aplicador’ se debe disponer de lo siguiente: contar
con título de licenciatura o Técnico Superior Universitario; contar
preferentemente con experiencia en
aplicación de instrumentos como
cuestionarios, registros de información estandarizada, pruebas de logro
educativo o exámenes de selección; tener competencias básicas en el manejo de tecnologías de la información; no
ser funcionario público en alguna dependencia del Gobierno Federal; no realizar
actividades relacionadas con los
Concursos de Ingreso o Promoción en el Servicio Profesional Docente de la etapa
en curso; estar libre de interés personal, familiar o de negocios del que
resulte beneficiado con los resultados de los procesos de evaluación del
Servicio Profesional Docente; no tener
antecedentes de mal
desempeño, impuntualidad, inasistencia
el día del examen, reportes de comportamiento indebido, negligencia, manejo inadecuado del
material o extravío de exámenes.
Además, para la
selección de los
aplicadores, las Autoridades
Educativas y los
Organismos Descentralizados
podrán recurrir a las bases
de datos de aplicadores que se
han conformado en diversos
procesos de evaluación. De
ser necesario, se
podrá emitir una
convocatoria pública o
invitar a profesionistas que cumplan con los requisitos para realizar
las actividades del aplicador. Pero estos son normas para sólo los aplicadores,
jerárquicamente encima están los evaluadores.
Para ellos
–son más importantes- las definiciones aún no se dan. El INEE publicó en el
Programa que en el mes de abril de 2014, se expedirán los lineamientos en los
que se establezcan los requisitos y procedimientos para la certificación de
evaluadores. Ellos serán certificados, pero lástima porque las certificaciones
siempre han sido negocio. Históricamente la certificación la dan privados a
través de asociaciones civiles a cambio de una corta feria. ¿Se seguirá el
modelo de evaluaciones mezclando dinero a como ocurrió con la Prueba Enlace?
Esta cuestión involucra definiciones doctrinarias de educación pública mexicana
pues los evaluadores deberán certificarse. ¿Se retraerá más el Estado Mexicano
y cederá más espacios a los privados que ven en la certificación un negocio?
Se añade: “Desde la
perspectiva del INEE,
los ‘especialistas en
evaluación’ deberán instalarse en las propias estructuras (¿?) del
sistema educativo y de la gestión escolar seleccionando al personal respectivo
de entre los docentes (¡) que, por su vocación, experiencia y liderazgo puedan
desarrollar los conocimientos y las competencias en el terreno de la evaluación
educativa, y convertirse en agentes activos de la evaluación educativa tal y
como se prevé en la legislación secundaria. A la formación de los especialistas
en evaluación que promueva el Instituto deberá sumarse una estrategia de
certificación de evaluadores, construida a partir de esquemas de
reconocimiento, evaluación, acreditación y registro de competencias
profesionales en la materia”.
Las
certificaciones se dan y reciben mediante dinero. Que no salgan más tarde con
que el trabajo no sirvió porque se mezcló dinero en la evaluación, reproche que
hubo para cancelar la prueba Enlace. Que recuerden que ya no habrá SNTE al cual
echarle la culpa del fracaso.
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@WenceslaoXalapa