EDUCACIÓN: LA PRÓRROGA IMPUNE
Wenceslao Vargas
Márquez
El 29 de mayo de
2015 el ex secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffet, conmocionó a los
mundos político y educativo del país cuando anunció que las evaluaciones
docentes de la reforma educativa se posponían hasta nuevo aviso.
Senadores,
diputados, el SNTE y su grupo interno que es la CNTE, la iniciativa privada,
asociaciones civiles y un largo etcétera de personeros tomaron nota y ajustaron
diversas posiciones frente al aviso que al final de cuentas sólo pospuso unos
pocos días (una semana) las citadas evaluaciones.
Hubo incluso
amparos en esa primera semana de junio de 2015. De acuerdo con un comunicado
emitido el lunes 8 de junio del mismo año por la organización Mexicanos
Primero, el Juez Sexto de Distrito en Materia Administrativa del Distrito
Federal ordenó dejar sin efectos la prórroga dada por la SEP y reactivar las
pruebas como consecuencia
del amparo interpuesto por Aprender Primero, brazo jurídico del
propio Mexicanos Primero.
El 8 de junio,
después de las elecciones federales intermedias, la SEP anunció que las
evaluaciones se reanudaban y en el aire quedaron las impugnaciones, las
diatribas, los aplausos, que se dieron en pro y en contra la decisión, y la
vida y las evaluaciones continuaron como si nada. Mexicanos Primero al parecer
dio como triunfo suyo la reactivación como consecuencia del amparo. Se dio a
entender ese amparo como si fuese una medida disciplinaria contra una SEP
rebelde que en su omisión no quedaba impune.
Medio año
después, en enero de 2016, hay otra suspensión de evaluaciones, pero la
historia es muy otra. Ahora la prórroga de la evaluación docente no es de una
semana sino de varios meses (febrero a noviembre) completada, adornada, con la
cancelación del Planea 2016, sucesora del difunto Enlace, constituyendo la
prórroga impune porque a esta extrañamente se le ha dejado correr y pasar sin
amparos que se le atraviesen en el camino ni reclamos de actores políticos tan
señalados como los que con su dedo índice apuntaron a Chuayffet por algo mucho
menor.
Una semana
contra varios meses.
La situación hoy
es tan grave que ha derivado en un enfrentamiento notorio entre SEP e INEE y
sus cabezas visibles. Acerca de esta prórroga impune anunciada en enero la SEP
dice que se efectúa por deficiencias técnicas (notoria pero no expresamente
imputables al INEE). Por su lado el INEE dice que la prórroga impune se efectúa
por falta de presupuesto (notoria pero no expresamente imputable a la SEP). En
medio de estas imputaciones recíprocas queda cancelada Planea 2016 y
prorrogadas de febrero a noviembre las evaluaciones docentes del segundo grupo
de docentes a evaluarse para efecto de Permanencia en el empleo. En realidad la
prórroga impune se queda sine die.
La arista de la
reforma educativa que es la evaluación docente ha avanzado a tropezones desde
su instauración. Los calendarios son modificados con frecuencia. Desde este
espacio llevamos un conteo de nueve calendarios (o un calendario con nueve
modificaciones, que es lo mismo para todo efecto práctico): 26 de febrero, 21
de mayo, 22 de junio, 30 de julio, 10 de agosto, 15 de septiembre, 29 de
octubre, 5 de noviembre, todos del 2015. Hay que añadir el del 15 de enero de
2016. A este calendario 2016 decidieron, por fin, mejor quitarle la fecha (consultado
7-feb-2016) para que nadie lleve el conteo del desastre.
A esto hay que
sumar no la omisión pero sí el ocultamiento que se hace de los Criterios
Técnicos publicados el 13 de noviembre y que dicen en resumen que la etapa uno de
la Evaluación Docente ya no vale y que de las otras tres, para efecto de
permanencia (no ser cesado) basta con presentar una sola, con una basta. La
etapa número tres (número dos al quitar la uno) que es presentar el examen de
conocimientos desde luego que ya no importa. La existencia de estos Criterios
Técnicos ha sido poco difundida porque difundirla implica desanimar al docente de
ir a la foto en autobuses y sedes donde los gobiernos compiten por llevar a la
evaluación al mayor número posible de educadores.
No sé si la
representación de la SEP en Veracruz haya dicho algo al respecto. Creo que no.
Pero la representación de Tamaulipas es, hasta donde sabemos, la única que ha
hecho comparaciones entre las prórrogas de mayo-junio de 2015 y la de enero de
2016. Una nota de prensa de aquel estado
dice:
“La suspensión
de la evaluación docente no debe ser ‘mal interpretada’ como sucedió la
anterior ocasión que fue en época electoral, dijo el delegado de la SEP en
Tamaulipas dijo que en esta ocasión el contexto es distinto, “en aquella
ocasión iba a ser la primera vez y no se había ensayado siquiera todo el
ejercicio”, argumentó”. Hasta aquí la nota.
Es notorio el
trato mediático diferenciado entre la prórroga muy castigada de 2015 por una
semana y la impune de 2016 por varios meses. La SEP y Nuño resultan hoy
mediáticamente protegidos (¿por el 2018?) y nadie parece tomar en serio nota alguna
de lo ocurrido siendo mucho más grave.
En cambio, el
año pasado, sobre Emilio Chuayffet, que nunca fue presidenciable, apenas
concluyó de llegar su comunicado a los medios, cayó una copiosa, copiosísima, una
nauseabunda lluvia de …. ideas.
@WenceslaoXalapa