domingo, 18 de diciembre de 2016

PISA y los culpables


PISA Y LOS CUPABLES

Wenceslao Vargas Márquez


Cuando los interesados en el tema de la educación pública mexicana nos hallamos en asépticos entornos académicos, pedimos la palabra, engolamos la voz,  y con voz meliflua dictaminamos que la educación es un tema multifactorial, y que sus aciertos y errores dependen de una larga cantidad de variables y de los más disímbolos agentes.


Pero cuando hay resultados adversos que se han hecho públicos la asepsia académica se echa de lado, no pocos agentes toman el cuchillo con los dientes y asaltan el barco de las discusiones señalando (depende de quién señale) que hay un único responsable: la SEP dice que el antiguo SNTE, el nuevo SNTE dice que las autoridades, asociaciones civiles dicen que Elba Esther Gordillo, cercanos a Gordillo que Calderón, Calderón dice que Fox, la izquierda (¿hay?) dice que la OCDE, la OCDE insiste en que los docentes, los bachilleratos que la secundaria, la secundaria que las primarias y primarias que preescolar, los de preescolar (mala onda) acusan a los de maternal y a los recién nacidos de 50 días, desdentados, y que no se pueden defender, preoupados por el pañal nauseabundo; el desorden en el diseño y la implementación de las pruebas Enlace-Planea apuntan con dedo flamígero al INEE. Se pasan (nos pasamos) los días buscando un único responsable cuando habíamos quedado en el cubículo que los responsables de éxitos y fracasos educativos debe ser multivariable. Así, hasta que el escándalo de corrupción de otro gobernador o los XV de Rubí echen el tema al olvido al menos hasta la aparición de un nuevo resultado PISA.

El Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA, por sus siglas en inglés), revisa cada 3 años a alumnos de 15 años de edad y en esta ocasión ser evaluó a 72 países (35 de la OCDE). En Matemáticas, contribuyen al mal desempeño las políticas públicas que induce a aprobar alumnos en la educación primaria hayan acreditado o no conocimientos y habilidades; contribuye que al plan de estudios de los bachilleratos federales se les haya quitado una hora de clases semanales a cuatro de seis disciplinas matemáticas desde el 2008 y no hay poder humano que haga ver a la autoridad lo dañino que es esta reducción cuando se sabe que llegan a las prepas alumnos que no saben ni las tablas de multiplicar.

Los bachilleratos federales de la SEP tienen la indicación de que para el nuevo año 2017 no se le podrá poner a un alumno una calificación más baja que un cinco en cada uno de los tres exámenes parciales de todas sus materias; el alumno necesita obtener 18 puntos en un curso para que con un promedio de seis pueda acreditar. Pues bien, con estar sentado y respirar ya obtuvo 15 puntos durante el semestre. Con demostrar que tiene tensión arterial estable (120-80) podría lograr los tres puntos que le faltan y acreditará una materia de la que nada sabe. Luego vendrá la prueba PISA 2018 y estallará de nuevo el escándalo cuando hay causales de reprobación que pueden abordarse de inmediato y no se hace. Aquí hemos anotado dos. Urge frenar la disposición de poner un mínimo de 5 a quien nada sabe y nada ha hecho en su curso; urge cancelarla donde ya está implantada.

¿De qué sirve poner el piso reprobatorio en cinco a partir del año 2017? Servirá para que las autoridades educativas digan que gracias a la reforma educativa el promedio de aprovechamiento incrementó notablemente en los bachilleratos (ficción obvia cuando se desechan el cero, el uno, el dos, el tres, el cuatro, en el cálculo de la media aritmética). Este ascenso al quitar las cifras más bajas permitirá un engaño interno, en casa, pero no servirá para mejorar en la preocupación de varios que es la prueba PISA, nuestra diosa transnacional.

Nuestra diosa transnacional PISA es una actividad privada encomendada a la editorial transnacional Pearson quien desde septiembre del año 2011 festejó que era la titular para el negocio de la aplicación multinacional de la prueba en el año 2015 (bit.ly/2gZhFYj). Ya anunció que le tocará igualmente hacer el negocio en el año 2018 (bit.ly/2hW9Nse). Esos resultados se conocerán en 2019 con la primera generación de alumnos mexicanos que serán hijos plenos de la reforma educativa 2013.

Los de Pearson (vía PISA) son privados que arman escalafones internacionales, como el Ceneval en lo doméstico que es una asociación civil mexicana dedicada a la educación superior pero que se ha metido a la educación básica en las evaluaciones del INEE para calificar la permanencia de docentes en su empleo. Cuando se habla de la privatización de la educación hablamos de esto: que privados internacionales y locales se metan y subordinen al Estado a calificar la educación como las calificadoras (Moody's, Standard & Poor's, Fitch) miden los riesgos crediticios. Es lo mismo. La retracción de los Estados en aras del mercado. Se infartaría Vasconcelos.

Al momento de redactar estos párrafos ya el escándalo por los resultados PISA 2015 ya amainó y casi desapareció. Así es esto. Lo que viene en la agenda educativa es observar la buena o mala marcha de Enrique Pérez al frente de la Secretaría de Educación de Veracruz bajo el gobierno PAN-PRD. Lo que viene son los resultados 2016 del INEE para la permanencia o no de docentes en su salón de clases (etapa anual que fue optativa). Lo que viene es el restablecimiento de las pruebas INEE 2017 obligatorias donde ya habrá personal docente no idóneo que habrá resultado ‘insuficiente’ por tercera ocasión, a principios del 2018, y pedirá el retiro económico del que habla la ley docente. Nos encontraremos con que se hallan en marcha las campañas presidenciales y que no hay dinero para pagar lo que la misma ley ofrece.

Por lo demás, si se trata de buscar culpables por los (malos) resultados de la prueba PISA 2015, a donde menos deben mirar las autoridades es a los docentes mexicanos. La razón (eluni.mx/1TDgXhs) es que el 84.7% de los docentes mexicanos son idóneos y suficientes, buenos o excelentes, según criterios y resultados del propio INEE en el año 2016 publicados con bombo y platillo por la SEP en febrero 29.

Así, hay que buscar responsables por otro lado.
--------------------------------------------------------------------------------------------------------
@WenceslaoXalapa