La prisión de Gordillo para
escépticos
Wenceslao Vargas Márquez
La maestra Gordillo, exdirigente del SNTE, fue
trasladada su domicilio hacia las dos de la mañana del sábado 16 de diciembre.
Podemos concluir que no hay elementos para
suponer que esta prisión domiciliaria fue consecuencia de un acuerdo político
con el SNTE y el partido Nueva Alianza. Hay evidencias. Basta revisar los
silencios, basta revisar los muros del silencio, los muros de las cuentas en
Facebook de múltiples personeros del SNTE, de los personeros que se hallan en
primer o segundo plano, permanecieron, en general, ajenos al tema. No hace
falta que se les indique. Notan que el tema no debe tocarse y no lo tocan en
ningún sentido.
Veamos las notas de redes sociales organizacionales
en Twitter, Facebook, noticieros y boletines: El muro de la cuenta de Twitter
del SNTE nacional se mantuvo en silencio. La última nota previa a la liberación
de Gordillo fue publicada el día 15 de diciembre a las 13:58 y se relacionaba
con acuerdos entre el sindicato y el gobierno de Jalisco, sede del próximo
congreso nacional de elecciones. Los días 16 y 17 fueron de silencio. El
siguiente tuit se publicó hasta las 11:40 del lunes 18 de diciembre para
anunciar algo de un centro de bienestar; a las 12:42 se publicó un video
relacionado con la violencia intrafamiliar.
A las 13:12 del lunes 18 de diciembre se publicó
el noticiero interno del SNTE No. 179. Por la fecha, ese era el espacio para ocupar
todo el noticiero con el tema de la prisión domiciliaria de la exdirigente
nacional, pero no. Los temas, entre otros, fueron: la gobernanaza, un libro
sobre la violencia contra mujeres, préstamos del ISSSTE, y cómo hacer galletas
de lentejas (bit.ly/2B3XuQs, no es broma). ¿Cómo pueden explicar los teóricos
de la conspiración que el tema haya sido vetado? ¿Cómo se explica que el SNTE y
el Panal intervinieron para llevar a Gordillo a su casa pero el tema no es
tocado en ninguno de los espacios que ambos tienen a su disposición?
En materia de comunicados oficiales también hubo
silencio. Los últimos comunicados del SNTE fueron el 52 del 10 de noviembre
anunciando el llamado interno a elecciones, el 53 del 25 de noviembre, el 54
del 5 de diciembre y el 55 del 19 de diciembre para avisar de la presentación de
la dirigencia ante el nuevo titular de la SEP, Otto Granados Roldán. Ni uno
más. Silencio en todos los boletines en cuanto al tema de la exdirigente. El
silencio institucional del partido Nueva Alianza fue también notorio si exceptuamos,
por supuesto, las declaraciones de cajón de su líder nacional, Luis Castro. La
liberación de Gordillo fue un tema perfectamente ignorado, prueba de la
incomodidad que el asunto genera en los dos entornos citados, el partidista y
el sindical.
J. Castañeda. Imagen Wikipedia |
Hay más evidencias para razonarlas usando las
pequeñas células grises que mencionaba Hércules Poirot. La exlideresa del PRI
debió interponer un amparo (el 1076) el 15 de diciembre para lograr más
libertades físicas dentro de su domicilio. Tiene prohibido ver televisión,
acceder a computadoras, salir del departamento y recibirá sólo llamadas
telefónicas que se le autoricen previamente. Las visitas serán sólo de
familiares, abogados y médicos y tiene fija una tobillera electrónica.
En lo la lógica del complot y de la conspiración para que opere desde el SNTE y Nueva Alianza en favor del PRI esto no es consistente. Debería la exlideresa tener acceso a dos o tres televisores, a diez computadoras en línea, a llamadas telefónicas sin límite a través de cinco líneas fijas y ocho móviles, y a visitas indiscriminadas de parte de todo el mundo, si no, cómo operará ella el “apoyo unánime del magisterio en favor del PRI”.
En lo la lógica del complot y de la conspiración para que opere desde el SNTE y Nueva Alianza en favor del PRI esto no es consistente. Debería la exlideresa tener acceso a dos o tres televisores, a diez computadoras en línea, a llamadas telefónicas sin límite a través de cinco líneas fijas y ocho móviles, y a visitas indiscriminadas de parte de todo el mundo, si no, cómo operará ella el “apoyo unánime del magisterio en favor del PRI”.
Este último es otro tema que constituye evidencia
que sólo sabe quien lo revisa con espíritu imparcial: el SNTE no es un
sindicato monolítico que opera unánimemente en favor de un partido político
como lo suponen una larga cantidad de analistas políticos. Eso es totalmente
falso pero muchos los siguen suponiendo.
El millón 600 mil militantes del SNTE refleja
un mundo político plural. Tiene militantes, dirigentes y simpatizantes
partidistas de todo tipo, incluyendo al PRI, al PRD, al PAN, a Morena, y a
gente sin partido y sin militancia, como el que suscribe estos párrafos. El gordillismo militó con Morena en el Estado de México durante las elecciones. Al
parecer, sólo al parecer porque no hemos estudiado las cifras al detalle, Nueva
Alianza no es de los más favorecidos internamente; una prueba de ello son las
elecciones a gobernador de Veracruz en 2016. El tema de la reforma educativa ha
tenido muchas consecuencias.
Por supuesto que los teóricos del complot y de
las conspiraciones tienen respuestas (muy fáciles) para todo. Desde nuestro
sofá de cesante, sin información confidencial de ningún tipo, con diez meses (marzo-diciembre)
sin empleo y sin ingreso, a la espera de una justicia administrativa que tarde o
temprano llegará, apreciamos, en resumen, lo siguiente, usando sólo lo que
Poirot recomendó:
Tienen razón Meade, Ochoa y Castro. No encontramos
elementos para suponer que el SNTE y Nueva Alianza hayan solicitado -y logrado- la prisión domiciliaria de la maestra Gordillo como condición para apoyar el
PRI con el voto nacional del magisterio.
Sólo escribir la larga frase da
flojera por los múltiples despropósitos que tiene.
Twitter @WenceslaoXalapa
Post-scriptum.- Después de escrito el día 21 y publicado el 22 este texto, apareció Fernando González Sánchez, yerno de EE Gordillo, con López Obrador, en Hidalgo, en la tarde del 23 de diciembre. Fernando González Sánchez es directivo de las Redes Sociales Populares (RSP) de Morena, dato que no teníamos al redactar.